viernes, septiembre 28, 2012

El guardián entre el centeno

El guardián entre el centeno
El guardián entre el centeno

-¿Sabes lo que me gustaría ser? ¿Sabes lo que me gustaría ser de verdad si pudiera elegir?
-¿Qué?
- ¿Te acuerdas de esa canción que dice, «Si un cuerpo coge a otro cuerpo, cuando van entre el centeno…» Me gustaría…
-Es «Si un cuerpo encuentra a otro cuerpo, cuando van entre el centeno» -dijo Phoebe-. Y es un poema. Un poema de Robert Burns.
-Ya sé que es un poema de Robert Burns.

Tenia razón es «Si un cuerpo encuentra a otro cuerpo, cuando van entre el centeno», pero entonces no lo sabía.

-Creí que era «Si un cuerpo coge a otro cuerpo» -le dije-, pero verás. Muchas veces me imagino que hay un montón de niños jugando en un campo de centeno. Miles de niños. Y están solos, quiero decir que no hay nadie mayor vigilándolos. Solo yo. Estoy al borde de un precipicio y mi trabajo consiste en evitar que los niños caigan a él. En cuanto empiezan a correr sin mirar adónde van, yo salgo de donde esté y los cojo. Eso es lo que me gustaría hacer todo el tiempo. Vigilarlos. Yo sería el guardián entre el centeno. Te parecerá una tontería pero es lo único que de verdad me gustaría hacer. Sé que es una locura.

miércoles, septiembre 26, 2012

Las lágrimas de la conciencia

Generando conciencia
Generando conciencia

Con cada retumbo del aire,
el surco de las lágrimas
delinea un interior por esbozar
y sueña un exterior por pintar.
...
Con cada gota de rocío,
un rey hilvana rayos de luz
en la tela de un alma,
el tejido de nuestro espíritu. 
...
Somos puro tránsito 
de un sollozo por atender,
de un cielo por despertar,
de una tierra por inundar.

*********

Cada lágrima enseña a los mortales una verdad. (Platón)


lunes, septiembre 24, 2012

domingo, septiembre 23, 2012

La música de las esferas


La música es el instrumento principal que utiliza Apolo el sanador, y se sabía que esa música reflejaba la música de las Esferas -la armonía cósmica. Así se entiende a la enfermedad como un estado inarmónico del alma, una ruptura de la conexión humana con el orden cósmico mayor, por ende, lo que hace la curación es restaurar la armonía interior y reconectarnos con la fuente.

Extracto de: Apolo, el dios Sol
Khyma

Rey sol, dime como arder. Aprendimos a mirar con la duda entre los dedos y a tientas. Descubrimos que al final, las palabras que no existen nos pueden salvar... sin hablar. [...] Sólo quiero ir mas allá, solo quiero que esta herida se prenda. Ser el humo que al final, escapó de lo que existe por ver qué hay detrás, más allá. (Extracto de Rey Sol de Vetusta Morla)

Castell Capdepera Mallorca
Castell de Capdepera (Mallorca):
el brillo de un sonido, la vibración de un destello


viernes, septiembre 21, 2012

Mi ángel de la guarda

Un ángel de la guarda
Un ángel de la guarda

Hace unos días, concretamente la mañana del miércoles 29 de Agosto, sentí repentinamente un dolor punzante y prolongado en mi pierna izquierda, por debajo de la rodilla. Ciertamente aquel dolor me extrañó y me asustó. Me pregunté de dónde podía provenir.

Poco después pensé en mi hijo, el cual se encontraba fuera de Barcelona. Me preguntaba si le habría ocurrido algo. Le llamé por teléfono. Me contestó y me tranquilicé cuando me dijo que se encontraba perfectamente.

Algo más tarde recordé que alrededor de tal fecha, hacía 15 años, a mi abuela le habían amputado una pierna a causa de una cangrena que finalmente acabaría con su vida. De hecho, unas semanas después, concretamente un 21 de Septiembre, mi abuela dejaba este mundo.

Yo pasé varios días y varias noches junto a ella en el hospital donde acabaría sus días. Sintiendo su sufrimiento e intentando compensar una mínima porción del cuidado que ella me había regalado durante toda su vida, pero especialmente cuando yo era un niño y convivíamos bajo el mismo techo.

Y también me vino a la memoria otro episodio de mi vida que ocurrió hace ya muchos años, tras su muerte.

Cierto día, tras una discusión con mi entonces pareja, abandoné el escenario de la disputa lleno de ira y dando un portazo, tal como solía hacer en aquellos casos. Salí del piso, cogí el coche y me dirigí hacía ningún sitio a toda velocidad, tal como solía hacer en aquel tiempo.

Aquel día llovía. La calzada estaba totalmente mojada. Tomé a toda velocidad una de las autopistas de salida de Barcelona. Conducía sin mucha atención mientras mantenía mi corazón lleno de ira y mi cabeza congestionada de pensamientos airados. Después de una curva con una visibilidad limitada, me encontré con una inesperada retención de vehículos.

Intenté frenar a tiempo pero no pude. Aquel coche no disponía de los avances tecnológicos habituales hoy en día. Todavía no sé cómo pero el coche se fue deslizando durante un lapso interminable a través del arcén izquierdo de la autopista, entre el estrecho espacio que separaba un muro a la izquierda y los coches detenidos a la derecha.

Cuando pude detener el coche, salí del mismo desconcertado.

Me preguntaba qué había ocurrido. Yo estaba intacto y, tal como pude comprobar después, el coche también lo estaba. También pude observar de reojo como algunos conductores salían de sus vehículos y me miraban entre la indignación y el asombro. Instantes después, yo ya no podía mirar a ningún lado, tan solo podía fijar mi mirada en el asfalto, apoyado en el coche, mientras intentaba recuperar el aliento y el entendimiento.

Continuaba preguntándome cómo podía haber colocado un vehículo sin control en un arcén tan estrecho y recorrido decenas y decenas de metros hasta detenerlo sin haber sufrido ningún rasguño. Sin duda, había tenido mucha, demasiada suerte.

Más tarde, aquel mismo día, en la forma de un recuerdo sumergido en una momentánea llama, me llegó la imagen de mi abuela María.

Abuela María, sigo conectado a tu dolor pero también a tu protección: la más dulce y la más bondadosa de todas. Aquel día lluvioso sentí que habías estado a mi lado guardándome de mi falta de consciencia y ahora siento que aun continuas a mi lado, como siempre hiciste, desprendiendo bondad a través de tus dulces miradas, tus bondadosas palabras y tus sentidas caricias. Toda tú desbordabas y desbordas dulzura, bondad y amor.

Abuela María, gracias por continuar a mi lado.


María Tiburcio Muñoz


Recordatorio María Tiburcio Muñoz


miércoles, septiembre 19, 2012

Un sueño dentro de un sueño

Frederick Sandys
Frederick Sandys

¡Toma este beso en tu frente!
Y, en el momento de abandonarte,
déjame confesarte lo siguiente:
no te equivocas cuando consideras
que mis días han sido un sueño;
y si la esperanza se ha desvanecido
en una noche o en un día,
en una visión o fuera de ella,
¿es por ello menos ida?
Todo lo que vemos o parecemos
no es más que un sueño en un sueño.

Yo permanezco en el rugido
de una ribera atormentada por las olas,
Y aprieto en la mano
granos de arena de oro.
¡Que pocos y cómo se escurren
entre mis dedos al abismo,
mientras lloro, mientras lloro!
¡Oh, Dios! ¿no puedo yo estrecharlos
con más ceñido puño?
¡Oh, Dios! ¿no puedo salvar
ni uno, de la despiadada ola?
¿Todo lo que vemos o parecemos
no es más que un sueño dentro de un sueño?

lunes, septiembre 17, 2012

El renacer de un niño y la voz del río


Siddharta, la novela de Herman Hesse
Siddhartha, la novela de Herman Hesse

Largo tiempo siguió meditando sobre su transformación, escuchando el alegre cantar del pajarito. ¿No había muerto en su interior esta avecilla? ¿No había él mismo sentido su muerte? No, otra cosa había muerto en él, algo que anhelaba morir hacía tiempo. ¿No era aquello que él quiso matar durante los fervientes años de su penitencia? ¿No era acaso su propio Yo, su pequeño, inquieto y orgulloso Yo, con el que tantos años había luchado y al que siempre había sucumbido, ese Yo que resurgía después de cada muerte a impedirle la alegría e infundirle el miedo? ¿No era eso lo que por fin había muerto aquel día, ahí en el bosque, junto a ese ameno río? ¿Y no era gracias a esa muerte que él, ahora, se sentía otra vez niño, lleno de confianza y alegría, libre ya de todo miedo?

Intuyó Siddhartha entonces por qué como brahmán y como penitente había combatido en vano contra ese Yo. ¡El exceso de conocimientos, de versos sagrados, de normas rituales, mortificación, celo y aspiraciones lo había inmovilizado! Dominado por su orgullo, había sido siempre el más empeñoso, el hombre situado siempre a un paso por delante de todos los otros, siempre el hombre espiritual y sabio, siempre el sacerdote o el gran erudito. Y en ese sacerdocio, en ese orgullo, en esa espiritualidad se había escondido su Yo, en ellos se hallaba instalado y seguía creciendo, mientras Siddhartha creía poder matarlo con ayunos y penitencias. Mas ahora se daba cuenta, ahora veía que la voz misteriosa había tenido razón, que ningún maestro podría haberlo liberado nunca. De ahí que se viera obligado a ir por el mundo, a perderse en el placer y en el poder, en las mujeres y en el oro, a convertirse en mercader, en jugador de dados, en un hombre bebedor y codicioso, hasta que el sacerdote y el samana murieran en su interior. Por eso había tenido que soportar esos terribles años, soportar el hastío, la vacuidad y el absurdo de una vida monótona y perdida, soportarlo hasta el final, hasta la más amarga de las desesperaciones, hasta que el Siddhartha libertino y codicioso pudiera también morirse. Y de hecho había muerto: un nuevo Siddhartha había emergido del sueño. El también envejecería, también tendría que morir un día; efímero era Siddhartha, tan efímero como cualquier forma sensible. Pero ahora se sentía joven, era un niño: el nuevo Siddhartha, y se hallaba rebosante de alegría.

Estos pensamientos ocupaban su espíritu mientras escuchaba, sonriendo, los gruñidos de su estómago y el zumbido de una abeja. Sereno, contempló fluir el agua del río; nunca un agua le había gustado tanto como aquélla, nunca había percibido con tal fuerza y nitidez la voz y el sentido alegórico del agua que fluye. Le pareció que el río tenía algo muy especial que decirle, algo que él ignoraba todavía y lo estaba esperando. Siddhartha había querido ahogarse en ese río; en él se había ahogado ahora el Siddhartha viejo, cansado y desesperado. Pero el nuevo Siddhartha sintió un profundo amor por esas aguas huidizas, y en su interior decidió no abandonarlas muy pronto.

Extracto del Siddhartha de Herman Hesse

sábado, septiembre 15, 2012

viernes, septiembre 14, 2012

Artesanos, una película de vida


Frases de la película:
  • Compartir lo mejor de uno es abrir el corazón para recibir lo mejor de todos
  • Ser artesano de la vida es aceptar la luz de la creación en nuestras manos
Sus/Nuestras dedicatorias:
  • A la abuela y los abuelos, que soñaron para sus hijos de ahora el despertar del nuevo mundo
  • A la casa del árbol, el castillo de los sueños que nos ayuda a despertar
  • A la magia celta del bosque y a la sabiduría maya de la selva
  • A la mujer dormida que está dando a luz en la tierra sagrada de los volcanes
  • A los maestros que han iluminado el caminar de nuestras vidas
  • Al padre celestial y a la madre tierra, la sincronía divina
  • Y a todos los que entregan lo mejor de su vida en beneficio de todos
  • Creer es crear
Frases del film extraídas de Resumen de película Artesanos


Creer es crear 
crear es creer 
y es amar
y sentir 
y el latir de un corazón 
que late en sincronía 
con el latido de la vida.

jueves, septiembre 13, 2012

Todos los hijos son poesía

Niños de Cuento de Luz School, Ponpon. Kenia.
Niños de Cuento de Luz School, Ponpon. Kenia.


Enseñarás a volar…
pero no volarán tu vuelo.
...
Enseñarás a soñar…
pero no soñarán tus sueños.
...
Enseñarás a vivir…
pero no vivirán tu vida.
...
Enseñarás a cantar…
pero no cantarán tu canción.
...
Enseñarás a pensar…
pero no pensarán como tú.
...
Pero sabrás
que cada vez que ellos vuelen, sueñen,
vivan, canten y piensen…
...
¡Estará en ellos la semilla
del camino enseñado y aprendido!


*******

No todos los padres son poetas, pero todos los hijos son poesía (Anónimo)


martes, septiembre 11, 2012

Els homes no poden ser si no són lliures

Montserrat, un drac adormit que aviat despertarà
Montserrat, un drac adormit que aviat despertarà



[XXXVIII]

No convé que diguem el nom
del qui ens pensa enllà de la nostra por.
...
Si topem a les palpentes
amb aquest estrany cec,
on sinó en el buit i en el no-res
fonamentarem la nostra vida?
...
Provarem d'alçar en la sorra
el palau perillós dels nostres somnis
i aprendrem aquesta lliçó humil
al llarg de tot el temps del cansament,
car sols així som lliures de combatre
per l'última victòria damunt l'esglai.
...
Escolta, Sepharad: els homes no poden ser
si no són lliures.
...
Que sàpiga Sepharad que no podrem mai ser
si no som lliures.
...
I cridi la veu de tot el poble: "Amén."

******

Extracte de La pell de brau de Salvador Espriu




Tributo a Yoshito Usui


Yoshito Usui, descanse en paz
Yoshito Usui, descanse en paz

La risa es el sol que ahuyenta el invierno del rostro humano. (Victor Hugo)



lunes, septiembre 10, 2012

La luz sin llamas

El alquimista en busca de la piedra filosofal de Joseph Wright
Hennig Brand: El alquimista en busca de la piedra filosofal

18 de Julio

Wilhem, ¿qué sería sin amor el mundo para nuestro corazón? ¡Una linterna mágica sin luz! ¡Apenas pones la lamparilla aparecen sobre tu blanca pared imágenes de todos los colores! ¡Y aun cuando no fueran más que eso, fantasmas pasajeros, constituyen nuestra felicidad si los contemplamos como niños pequeños y nos extasiamos ante esas apariciones maravillosas! Hoy no he podido ver a Lotte, me retuvo una visita ineludible. ¿Qué hacer? Le envié mi criado solamente por tener a mi alrededor alguien que hoy hubiera estado cerca de ella. ¡Con qué impaciencia le estuve esperando, con qué alegría volví a verlo! Si no me hubiera dado vergüenza me habría gustado tomar su cabeza y la hubiera besado. 



Cuentan de la piedra de Bolonia que si se la pone al sol absorbe rayos y resplandece algún tiempo durante la noche. Lo mismo me sucedió a mí con el criado. La sensación de que los ojos de ella se habían posado en su rostro, en sus mejillas, en sus botones y en el cuello de su casaca ¡hacíamelo tan sagrado, tan valioso! En aquel instante no hubiera cambiado mi criado por mil táleros. ¡Me sentía tan a gusto en su presencia...! ¡Dios te libre de reírte! Wilhem, ¿será la felicidad producto de la fantasía?

Extracto de Las desventuras del joven Werther de Johann Wolfgang Von Goethe

***********

viernes, septiembre 07, 2012

La princesa, el guisante y la sensibilidad

La princesa y el guisante
Delicadeza y sensibilidad


Había una vez un príncipe que quería casarse con una princesa, pero tenía que ser una auténtica princesa, una princesa de verdad. Para encontrar a esta princesa, viajó por todo el mundo, pero en todas partes surgía algún inconveniente. Princesas las había a montones, pero el príncipe no podía estar seguro de que fueran princesas de verdad. Siempre descubría algo en ellas que no terminaba de gustarle. De modo que regresó a su palacio, melancólico y apesadumbrado, porque tenía muchísimas ganas de conseguir una princesa verdadera y hacerla su esposa.

Cierta noche se desencadenó una espantosa tormenta. El cielo se llenó de relámpagos y de truenos, la lluvia caía a mares sobre la tierra. ¡Era terrible! Entonces alguien llamó a la puerta de palacio, y salió el propio rey en persona para ver quién era.

En el umbral de palacio apareció una princesa ¡pero, Dios mío, qué aspecto tan lamentable tenía! El agua le chorreaba por el vestido y por el cabello, le entraba por la punta de los zapatos y le salía por los talones... Y sin embargo ella afirmaba que era una princesa de verdad. Así que exigía ser hospedada con la calidad de su rango.

"¡Esto lo averiguo yo enseguida!", pensó la anciana reina... pero no dijo nada. Se metió en el dormitorio, quitó toda la ropa de la cama y encima del somier puso un guisante... y encima del guisante colocó veinte colchones de pluma, y encima de los veinte colchones veinte edredones de lana. Allí tenía que dormir esa noche la princesa.

A la mañana siguiente le preguntaron como había dormido. "¡Oh! ¡terriblemente mal!" respondió la princesa. "¡Casi no he podido pegar ojo en toda la noche!. ¡Dios sabrá lo que había en la cama! ¡he dormido encima de algo tan duro que tengo el cuerpo lleno de magulladuras y moretones! ¡Ha sido algo espantoso!

Así pudieron comprobar todos que era una princesa de verdad, ya que tan solo una auténtica princesa puede notar la presencia de un guisante a través de veinte colchones y veinte edredones. ¡Solo una auténtica princesa puede ser tan delicada y sensible!.

De modo que el príncipe se casó con ella, seguro de haber conseguido lo que buscaba. En cuanto al guisante, lo guardaron en la cámara del tesoro, donde debe seguir todavía, si nadie se lo ha llevado. ¡Y esta sí es una historia auténtica y verdadera!


Cuento de Hans Christian Andersen extraído de La princesa del guisante

***********

El idioma del corazón es universal: sólo se necesita sensibilidad para entenderlo y hablarlo. (Charles Pinot Duclós)


jueves, septiembre 06, 2012

La piedra filosofal

Fausto: arquetipo y mito
Fausto: arquetipo y mito

Mefistófeles. - ¡Insensatos! ¡Nunca comprenderán hasta qué punto se enlazan el mérito y la fortuna; aun cuando llegasen a poseer la piedra de los sabios, el sabio faltaría a la piedra!

Fausto de Goethe, apunte final del capítulo "En el palacio imperial, la sala del trono"

**********

Goethe dijo de Homero:

¿Quién osó luchar con los dioses, y quién con el Único? Es hermoso ser un discípulo de Homero, aunque sea el último.

Alguien debería decir de Goethe:

¿Quién osó luchar con los dioses, y quién con el Único? Es hermoso ser un discípulo de Goethe, aunque sea el último.

miércoles, septiembre 05, 2012

El beso del sol en el rostro

Sunrise - Amanecer
El amanecer de una nueva conciencia

Me preguntáis como me volví loco. Así sucedió: Un día, mucho antes de que nacieran los dioses, desperté de un profundo sueño y descubrí que me habían robado todas mis máscaras -si; las siete máscaras que yo mismo me había confeccionado, y que llevé en siete vidas distintas-; corrí sin máscara por las calles atestadas de gente, gritando:

-¡Ladrones! ¡Ladrones! ¡Malditos ladrones!

Hombres y mujeres se reían de mí, y al verme, varias personas, llenas de espanto, corrieron a refugiarse en sus casas.

Y cuando llegué a la plaza del mercado, un joven, de pie en la azotea de su casa, señalándome gritó:

-Miren! ¡Es un loco!

Alcé la cabeza para ver quién gritaba, y por vez primera el sol besó mi desnudo rostro, y mi alma se inflamó de amor al sol, y ya no quise tener máscaras. Y como si fuera presa de un trance, grité:

-¡Benditos! ¡Benditos sean los ladrones que me robaron mis máscaras!

Así fue que me convertí en un loco.Y en mi locura he hallado libertad y seguridad; la libertad de la soledad y la seguridad de no ser comprendido, pues quienes nos comprenden esclavizan una parte de nuestro ser. Pero no dejéis que me enorgullezca demasiado de mi seguridad; ni siquiera el ladrón encarcelado está a salvo de otro ladrón.


********

Fuente: fragmento de "El loco" de Khalil-Gibran

Amanecer en Montjuïc
Un amanecer en mi ventana (Montjuïc)

martes, septiembre 04, 2012

Celebrando los latidos del corazón





A heart is not for breaking 
It's for beating out all the life it needs to begin
....
A church is not for praying 
It's for celebrating the light that bleeds through the pain



lunes, septiembre 03, 2012

La naturaleza del bien y del mal



Yin y Yang: frio y calor
Yin y Yang, oscuridad y luz, frío y calor, el mal y el bien


Fase 1. Respuesta luchar o huir:
Dios es seguridad, confort, alimento, asilo y familia.
El mal es amenaza física y abandono.
...
Fase 2. Respuesta reactiva:
El bien es tener aquello que deseas.
El mal es cualquier obstáculo para tener aquello que deseas.
...
Fase 3. Respuesta de la conciencia en reposo:
Dios es claridad, calma interior, y contacto con uno mismo.
El mal es desorden interior y caos.
...
Fase 4. Respuesta intuitiva:
Dios es claridad y ve la verdad.
El mal es ceguera y niega la verdad.
...
Fase 5. Respuesta creativa:
El bien es un alto nivel de conciencia.
El mal es un bajo nivel de conciencia.
...
Fase 6. Respuesta visionaria:
El bien es una fuerza cósmica.
El mal es otro aspecto de la misma fuerza.
...
Fase 7. Respuesta sagrada:
El bien es la unión de todo lo opuesto.
El mal ya no existe.
....
Fuente: "Conocer a Dios" de Deepak Chopra

*******

¡Esa respuesta sagrada 
parece tan fácil de entender 
para mi intuición,
y aun tan difícil de comprender 
para mi corazón!

*************

domingo, septiembre 02, 2012

La encantadora de serpientes

La encantadora de serpientes- Paul Desiré Trouibellert
La encantadora de serpientes

Aquella noche un áspid de cuatro colmillos me mordió, dejó su veneno en el centro de mi ser. 

Aquella pócima se deslizaba en mi interior. A su paso, saboreaba con asco como iban floreciendo frutos agrios en mis vísceras. Su legado se concentró allá abajo, en el fondo, a la derecha, donde acaban las entrañas. En un lugar donde dejé abandonadas cepas... y uvas podridas que corrompían sus raíces.

Aquella noche soñé con estrellas que perdían su gracia en negros agujeros. Soñé con el trono de un emperador. A la izquierda del trono se sentaba un loco bufón. A la derecha un sabio astrólogo. El loco soplaba y el sabio hablaba. 

¿Dónde estaba mi tan ansiado sol, mi tan vanagloriada luz?

Aquella noche dudé si estaba viendo la imagen de una serpiente en el espejo de mi alma. No dudé. La encantadora y la encantada anidaban bajo la piel de un mismo ser. Dos colmillos reflejados, un único veneno corriendo por mi sangre. 

********

sábado, septiembre 01, 2012